La misión de cada ser humano debe ser garantizar que ningún niño llegue al mundo para sufrir. El objetivo debe ser que a ningún ser humano le falte comida, donde el frío solo sea un pretexto para abrigar sus sueños, y donde sus condiciones de vida les permitan crecer sanos y felices, tal como promueven las Naciones Unidas.
Sin embargo, si las tendencias actuales continúan, se prevé que en 2030 la alarmante cifra de 575 millones de personas seguirá viviendo en la pobreza extrema, y 84 millones de niños no podrán asistir a la escuela, perpetuando así el ciclo de pobreza y
afectando la calidad de la salud.
Hope Foundation nos invita a cambiar esta realidad. Nos convoca a dar ese esfuerzo adicional para que las familias de la comunidad de Liguiqui puedan tener mejores días.
Estos niños, con sus corazones llenos de esperanza, nos enseñan una valiosa lección sobre la resiliencia y el amor. A través de sus ojos, vemos un mundo donde la compasión y la solidaridad pueden florecer, aun en medio de la carencia. Nos invitan a mirar más allá de nuestras comodidades y a reconocer la humanidad compartida que nos une.
Como voluntarios, tenemos el poder de marcar la diferencia. Cada acto de generosidad, cada donación, puede transformar vidas. Al unirnos, podemos proporcionar más que solo una comida; podemos ofrecer esperanza y construir un futuro mejor para estas familias.
Te invitamos a convertirte en parte de este cambio. Dona ahora y juntos podemos mejorar la vida de estas familias en Liguigui. Con tu ayuda, podemos asegurar que estos niños no solo sonrían por un momento, sino que también tengan la oportunidad de crecer con dignidad y amor.